AL CONTEMPLAR LOS CIELOS 

Al contemplar los cielos y la tierra, 
Cuando miro el paisaje y la mar;
 Por las noches contemplo las estrellas, 
Por las mañanas de las aves oigo el trinar. 
Cuando miro el sol que asoma por las colinas, 
Me admiro de lo que mi Dios creó;
 // Y es que tengo que decir con toda mi alma: 
¡Como mi Dios, no hay Dios, como mi Dios!//.

 2 

Muchos le sirven a dioses de madera, 
Dioses de yeso y hasta de metal; 
Pero no ven, no oyen y no hablan, 
Como no andan los tienen que cargar. 
Pero mi Dios tiene su trono allá en los cielos, 
Y es un Dios vivo que escucha mi oración; 
// A la presencia de mi Dios tiembla la tierra: 
¡Como mi Dios, no hay Dios, como mi Dios!//.